La gran mayoría de Pymes y autónomos externalizan ciertas tareas contables, fiscales y administrativas a una gestoría o a una asesoría. Pero, ¿te has preguntado cual es la diferencia entre gestoría y asesoría?
Una gestoría, también llamada oficina de servicios, es una organización que tiene como finalidad ofrecer a otras empresa y autónomos servicios de gestión.
Entre los servicios más importantes que puede ofrecer una gestoría está la contabilidad, fiscalidad, las nóminas y otras gestiones administrativas.
Por otro lado, una asesoría se encarga de ofrecer los servicios de gestoría y además pone un asesor a disposición de la empresa o autónomo.
Este asesor, responde las dudas administrativas, contables, fiscales o legales que puede tener el empresario. En otras palabras, una asesoría aconseja y resuelve dudas a las empresas o autónomos.
Índice
- ¿En qué se diferencian las gestorías respecto a las asesorías?
- ¿Se pueden complementar las gestorías con las asesorías?
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- Diferencia entre gestoría y asesoría
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¿En qué se diferencian las gestorías respecto a las asesorías?
Las gestorías y las asesorías están muy relacionadas entre sí, pues, aunque parezcan mínimas en su aplicación, tienen marcadas diferencias conceptuales.
Una de estas diferencias es que un gestor debe ser obligatoriamente colegiado, mientras que, un asesor no requiere de este aspecto.
La función del asesor, es la de asesorar al cliente respecto de los caminos que debe tomar para realizar tramitaciones ante organismos legales, fiscales, o tramites ante sus trabajadores.
Es decir, un asesor realiza un servicio de consultoría. Pero en cambio, un gestor realiza un trabajo más técnico, ya que, es la persona que ejecuta los trámites.
Un gestor cualificado, además de asesorar, será quien realizará los tramites necesarios ante los organismos públicos. Todo ello en nombre de la empresa o autónomo que lo está contratando. Podrá hacer desde una liquidación de impuestos, a el trámite de una herencia.
Como se citó anteriormente, un gestor debe estar obligatoriamente afiliado al Colegio oficial de Gestores Administrativos.
Además, deben ser profesionales que hayan estudiado carreras relacionadas con área empresarial y jurídica como Derecho, ADE, o Economía. Estos estudios aportan cierta preparación para realizar trámites legales.
Un asesor también podría ser un profesional del ámbito jurídico, y sumado a ello con experiencia en el área legal en alguna organización.
No obstante, al no ser colegiado en el Colegio de Gestores Administrativos, solo se resumen sus funciones para preparar a una organización a la hora de realizar algún trámite.
¿Se pueden complementar las gestorías con las asesorías?
Si, el hecho de que existan diferencias marcadas en los procedimientos y funciones de cada uno, es posible que ambos trabajen conjuntamente.
Esto le trae muchos beneficios a las empresas y autónomos en cuanto a desarrollo y evolución de los servicios que esta ofrece.
Además, el trabajo combinado de una gestoría y una asesoría garantiza una mejor forma de llevar a cabo diferentes procedimientos jurídicos que requiera la empresa.
Mucha gente asocia directamente las gestorías y las asesorías como términos similares que realizan la misma función. Sin embargo, dadas sus marcadas diferencias, tienen el mismo propósito de generar mayor eficiencia en una empresa.
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